Intercooler
La función del intercooler, al igual que otras piezas de transferencia de calor como el radiador o el condensador, es usar el movimiento del aire para refrigerar. Sin embargo, difiere de estas en dos aspectos: el intercooler es un componente del sistema de entrada de aire y, en vez de enfriar un fluido, enfría el aire que circula por sus tubos. Al enfriar el aire que ingresa al motor, el intercooler aumenta la densidad del oxígeno para mejorar la combustión de los vehículos que cuentan con un turbocompresor. Esta pieza posee la misma función que un refrigerador del aire de carga, pero se utiliza para aplicaciones de servicio ligero.
- Fabricado con componentes de la más alta calidad para garantizar la calidad y durabilidad del producto
- Diseñado con láminas de alta densidad con múltiples rejillas para una máxima eficiencia de enfriamiento
- Diseñado con precisión para un ajuste perfecto
- Todas las unidades se someten a pruebas de fuga para asegurar la instalación de unidades sin daños
Síntomas comunes de falla del intercooler
- Flujo de aire reducido
- Falla del turbocompresor
- Pérdidas de potencia del motor
- Mayor consumo de combustible
- Sale humo inusual del sistema de escape
Causas comunes de fallas
Los daños externos y los desechos en la carretera pueden causar fallas prematuras de los intercoolers. Internamente, las mangueras dañadas u obstruidas pueden causar una presión demasiado alta que fuerza o incluso rompe el intercooler. Por último, una instalación incorrecta del turbocompresor puede causar que el intercooler se obstruya y sufra daños.
Si se produjese una falla del intercooler, el motor no recibirá suficiente aire frío y denso, lo que producirá que la combustión no sea completa y que el escape emita combustible no quemado.
No reemplazar el intercooler puede afectar la potencia, el rendimiento del combustible y las emisiones.